sábado, 28 de febrero de 2009

Un libro corto, de los que gustan.

Hay libros de pocas páginas cuya lectura resulta muy agradable, y muchas veces me he preguntado el porqué. No son de esos "novelones" que duran semanas, en los que acabas conociendo muy bien a los personajes, o en los que las historias que relatan se van ensamblando con datos, perfiles, descripciones... No, todo eso apenas cabe en los libros a los que me refiero.

Me refiero a libros de poco más de cien páginas, que relatan una historia a menudo sencilla, y que con pocos trazos y pocas descripciones te meten directamente en un ambiente.

Quizá el modo de escribir y la sencillez, al menos aparente, del relato, hacen que se conecte pronto y enganchen con facilidad.

He leido unos cuantos de éstos, pero el último -que ha dado lugar a esta reflexión- es "Reducción de condena" de Patrick Modiano, del que no había leido nada.

¿A quién le pueden interesar unos recuerdos de infancia de un chico francés cuyos padres trabajaban en un circo y en algún otro negocio "poco claro"?
Pues pienso que tú mismo te puedes interesar si empiezas a leer el libro. Frases cortas y buena técnica. Interesante.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Libros que recomiendan seguidores de este blog

Para que, al menos, puedan servir de referencia a otros seguidores del blog, he recogido en esta entrada títulos de libros que algunos han recomendado en sus comentarios o emails.

Muchos no los he leido, a pesar de mi interés, pero basta que lo recomendeis vosotros para que me parezcan interesantes.

Pongo quién lo ha recomendado, el título y el autor.

Muchas gracias a todos.


Isabel: La ladrona de libros (es el título del libro, no me refiero a Isabel)

María: EL año del pensamiento mágico (Joan Didiot); Los caminos perdidos de Africa (Javier Reverte)

Mafalda: Vagabundo en Africa (Javier Reverte)

César: Lo que sueñan los lobos (Yasmina Kadra)

Loren: Bella del señor (Albert Cohen); Cosmética del enemigo (Amelie Nothomb); Si esto es un hombre (Primo Levi)

Eugenia: Los lobos (Hans Helmut Kirst,), El lazo púrpura, (de la trilogía Benasur de Judea)

Chon: Los renglones Torcidos de Dios (Torcuato Luca de Tena)

XGaztelu: Arte (Yasmina Reza)

Fiona: Reunión de Bachilleres (Franz Werfel)

Bastian: Vida de este chico (Tobías Wolff); Frankie y la boda (Carson McCullers)

Chemi: Como una novela (Daniel Pennac)

Cheché: En un lugar del atlántico (Faaton Diome); Amanecer en el desierto (Waris Dirie)

Teresa: El olvido que seremos (Héctor Abad)

Pilu: Cuando el mundo gira enamorado (Una semblanza deVictor Frankl, por Rafael de los Ríos)

Ion: El problema del dolor (C.S. Lewis)

Homero: Apología de Sócrates (Platon)

lunes, 16 de febrero de 2009

Otro libro impresionante. Duro pero útil.

De "Sin destino" se conoce más ahora la película que el libro.
Yo no he visto la película, pero lei el libro por mi interés hacia lo que se escribe sobre el holocausto judío, y el modo en que se vivió esa época en distintos paises europeos.


Como muchos de estos libros, Imre Kertész escribe un relato autobiográfico, pero creando un personaje para reflejar en él lo que fueron esos años de adolescente en los que de pronto cae en la cruda realidad de lo que significa ser perseguido y odiado.

Me impresionó especialmente la progresiva sensación de deterioro que se va produciendo en las personas cuando se les va arrebatando lo que tienen: lo material, lo personal, el trabajo, los vínculos afectivos, la intimidad... y todo por un motivo loco, absurdo.

Lo triste y lo valioso es que ha sucedido en realidad, yque podemos aprender mucho de ello.

Poco después de leer el libro, pude ver un estupendo e impresionante documental con el testimonio de varios judíos húngaros llevados a campos de concentración. Se titula "Los últimos días" y es también muy impactante.

martes, 10 de febrero de 2009

Un libro que me hizo pensar

Hacía tiempo que tenía cerca este libro, pero nunca me había decidido ni siquiera a abrirlo porque el título me parecía absurdo "El hombre que confundió a su mujer con un sombrero", la portada poco atractiva, no sabía quien era su autor, y no tenía ni idea de lo que podía tratar.


Como hay tantos libros posibles, pensaba: ¿Para qué enredar con los que no te interesan para nada?
Pero un día lo hojeé y lo ojeé un poco más detenidamente, ví que se trataba de una serie de casos clínicos, de enfermos neurológicos peculiares, muy bien escritos y muy bien descritos.
Empecé a leerlo con curiosidad, lo seguí leyendo con mucho interés, y lo terminé satisfecho de haberlo leido.

Hay casos que me impactaron mucho y que me han hecho pensar. El autor es Oliver Sacks,un neurólogo que expone los casos de algunos pacientes especiales como si fuera una novela
Tiene cierta dosis de humor, y pienso que su lectura puede aportar a la propia formación personal.
Lo recomiendo a quien sea capaz de leer estas cosas sin pensar que necesariamente le van a pasar a él.
ME INTERESA ESPECIALMENTE CONOCER VUESTRA OPINIÓN SI LO HABEIS LEIDO.

jueves, 5 de febrero de 2009

Crepúsculo ¡Cómo no!

Ya son bastantes los que me han preguntado si voy a poner en el blog algo sobre Crepúsculo y su saga, pues es el libro que está ahora de moda.

Debo decir que lo leí hace tiempo, cuando todavía no había salido el segundo, a petición de mi librería habitual para que les diera mi opinión, pues se estaba vendiendo mucho. Me gusta la literatura juvenil, y lo lei con gusto. Pongo aquí, prácticamente sin variaciones, la reseña que hice (pensando más en los padres); aunque entonces dije que gustaría a las adolescentes y parece que la fiebre ha pasado también a sus madres.

Es un libro de estructura simple, sin pretensiones literarias. Una novela romántica juvenil con mezcla de fantasía vampírica, quizá un poco abultada en páginas, que aguantarán con gusto las adolescentes a las que les guste leer libros de tipo romántico.El argumento es sencillo y los personajes están claros, aunque no cabe esperar de ellos perfiles psicológicos profundos. Son casi todos buenos, y a los malos se les distingue fácilmente.

Contra lo que puede parecer a primera vista, no es una novela de miedo y bodrio con protagonistas juveniles. El tema central es el enamoramiento romántico de un vampiro y de una chica de 17 años. Algo tan fantasioso que no hay peligro de mezclar realidad y ficción salvo en la imaginación.Por otra parte el vampiro es bueno, y su lucha constante es contener su tendencia natural de vampiro para no hacer daño a la chica de la que se ha enamorado. Me parece que este punto es positivo y puede hacer pensar a los lectores de esas edades.

También me parece positivo que los protagonistas, alumnos de instituto americano de 17-18 años, hablen de sus enamoramientos y aludan al primer beso sin llegar más allá en las relaciones. Es un alivio, pues no suele ser habitual en muchas novelillas para gente joven, aparentemente inocentes pero que mezclan todo, y en las que cualquier tipo de relación parece permitida o justificada.

El último tercio del libro tiene algo más de acción y menos diálogos; los acontecimientos me parecen previsibles y preparan las siguientes entregas.

En resumen, con poco valor literario, pero no me parece desaconsejable, sobre todo teniendo en cuenta el bajo nivel ético de la mayor parte de la literatura juvenil actual, tanto de narrativa como de ficción y fantasía. Además te enseña cosas sobre los vampiros que nunca viene mal saber, por si acaso.

Es posible que los siguientes: “Luna nueva”, “Eclipse” y “Amanecer”, pueden seguir este mismo perfil, pero también es probable que la cosa se complique y se meta por caminos menos recomendables.

No sé lo que habrá pasado, porque no los he leido, pero parece que el resultado es aceptable, y que Stephenie Meyer lo notará en su cuenta corriente.

miércoles, 4 de febrero de 2009

Una mujer en Jerusalén

Me pregunta Terry –comentarista habitual de este blog– si puedo leer “Una mujer en Jerusalén” y decirle mi opinión. Aunque mi lista de libros pendientes es larga y sigue aumentando, una hermana es una hermana, y no veo posible negarme a su petición, así que lo he leído estos días.

Es una novela actual, que se desarrolla en Israel, con trama y protagonistas de hoy: una mujer extranjera muere en un atentado suicida, nadie se interesa por ella ni reclama su cuerpo, y los directivos de la empresa donde trabajaba como limpiadora (en concreto el presidente y director de recursos humanos) deciden hacer algo por ella y por su familia.

Está bien escrita por Abraham B. Yehoshua y bien traducida. La narración es lineal, cronológica, pero tiene algunos trazos que la hacen diferente de lo que suele ser habitual, por ejemplo: utiliza un tono impersonal, como distante de los personajes, para referirse a ellos, de hecho sólo aparece un nombre propio, el de la mujer muerta. Mete de vez en cuando, para introducir algunos cambios de escenario, el punto de vista de personas colaterales que no vuelven a salir.

El argumento me ha enganchado y lo he seguido con interés durante las dos primeras partes del libro. En la tercera la historia se vuelve un poco farragosa y da la impresión de que pretende el autor sugerir entrelíneas demasiadas interpretaciones humano-político-sociales. También el final llega de modo abrupto.

Creo que es una novela buena, pero se la recomendaría sólo a quien sea un buen lector, le guste la novela urbana actual y le interese la actualidad de Israel. Si no es así, pienso que no la terminará de leer.