martes, 25 de noviembre de 2014

El libro de mi destino


La autora de esta novela, Parinoush Saniee, tiene 65 años y es iraní.
No ha escrito su autobiografía, aunque está planteada como una historia personal contada por la protagonista. Pero al leerla se nota que sabe de lo que está hablando, se percibe la base de una vivencia personal y está claro que ha sido necesaria mucha documentación.

Es la historia de una mujer, desde que es adolescente, a mediados de los años 70 del siglo pasado hasta la actualidad. Fueron, y siguen siendo, años convulsos en el mundo, y de modo particular en Irán (antigua Persia).


A la sombra del frágil gobierno del sha de Persia, en connivencia con las potencias occidentales, se fueron fraguando revoluciones de diverso signo, religiosas, políticas y sociales. Se juntó la revolución comunista, con los últimos años de la dictadura, la guerra con el vecino Irak, el resurgimiento del Islam más fundamentalista, etc.

En aquel país, de rica y antigua cultura, conviven todo tipo de personas, y a través de los ojos imparciales de la protagonista se van viendo las diversas tendencias y la influencia en la gente.

Es un libro con el que se aprende. No es una novela de acción y guerra, sino una novela social. Una mujer fuerte, que quiere ser libre para decidir en un país teóricamente libre, pero que se ve coartada desde muy joven por una tradición religiosa que le abruma, después le toca de cerca la revolución comunista por medio de las actividades políticas de su marido, más tarde la revolución radical islámica en sus hermanos de sangre, y finalmente la occidentalización de alguno de sus hijos, emigrado a Europa.

Una hija, hermana, esposa y madre, cuyo principal objetivo es cuidar a su familia y conseguir un trabajo digno.
Pienso que es capaz de ofrecernos una visión certera, y una crítica ponderada y real, sobre lo que importa en la vida.

Me ha resultado muy interesante esta novela. Quizá guste más a las mujeres que a los hombres, pero me parece muy adecuada para conocer mejor la historia reciente de Iran, y para comprobar la realidad actual de una parte de la población musulmana.

lunes, 3 de noviembre de 2014

Un libro interesante: "La hija de la criada"

Hoy son ya muchos a los que el apartheid de Surafrica les suena lejano. Sólo lo relacionan con Mandela y con algunas películas de negros. Y, según una pequeña encuesta propia, se puede mezclar y confundir con la esclavitud en América y con los campos de concentración nazis.

De algún modo esto es positivo, porque hace ya 24 años que, gracias a Dios, terminó esa segregación racial activa en Sudáfrica.



Desde hace años he admirado a personas como Biko y Mandela, me he emocionado con películas como "La fuerza de uno", y tengo en mi lista de Spotify coros de música negra surafricana que ponen los pelos de punta.

Por todo esto, en cuanto empecé a leer "La hija de la criada" estaba seguro de que me iba a gustar. Y así ha sido. Es una historia de miserias y heroicidades, que sitúa en el lugar y en el ambiente, que logra emocionar y toca el sentimiento, pero sin llegar al sentimentalismo lloriqueante.

Una historia con dos personajes centrales muy elaborados, dos mujeres, que representan el mejor lado de cada raza. Es difícil no sintonizar con la pequeña Ada, a la que vemos crecer casi hasta hacerse anciana, y con la soledad de la señora Cathleen, en un mundo que ella buscó, pero al que no logra adaptarse.

La autora, Barbara Mutch,es sudafricana, nieta de inmigrantes irlandeses, y vivió en ese país durante la época del Apartheid. Le gusta la música y eso es un eje fundamental en la novela.
Un libro recomendable para todos los lectores.